Lo he recibido a través del WhatsApp y me ha parecido interesante. Para los ignorantos e ignorantas Perder 5 minutos en leer este email, merece realmente la pena. Está escrito por una profesora de un instituto público. Yo no soy víctima de la Ley Nacional de Educación. Tengo 60 años y he tenido la suerte de estudiar bajo unos planes educativos buenos, que primaban el esfuerzo y la formación de los alumnos por encima de las estadísticas de aprobados y de la propaganda política. En jardín (así se llamaba entonces lo que hoy es “educación infantil” mire usted) empecé a estudiar con una cartilla que todavía recuerdo perfectamente la A de “araña”, la E de “elefante”, la I de “iglesia”, la O de “ojo” y la U de “uña”. Luego, cuando eras un poco mayor, llegaba “Semillitas”, un librito con poco más de 100 páginas y un montón de lecturas, no como ahora, que pagas por tres tomos llenos de dibujos que apenas traen texto. Eso sí, en el Semillitas, no había que colorear ninguna pá